Caja Rural de Teruel amplía su seguro dirigido a proteger ciberataques a profesionales autónomos

Caja Rural de Teruel y Seguros RGA, la compañía aseguradora del Grupo Caja Rural, fueron entidades pioneras en el lanzamiento de un seguro dirigido a ofrecer una protección completa a empresas frente a ataques informáticos. Debido al incremento de este tipo de ciberataques en nuestro país a todo tipo de negocios, Caja Rural de Teruel amplía las coberturas de este seguro a profesionales autónomos para cubrir la necesidad creciente de este colectivo de contar con el asesoramiento especializado de expertos que ayuden a prevenir y gestionar este tipo de ataques, protegiendo este riesgo de forma complementaria a las pólizas de seguro tradicionales con las que ya cuenta la compañía.

Los riesgos cibernéticos pueden afectar a cualquier tipo de actividad profesional independientemente de su sector, y las pólizas de seguro de multirriesgo o responsabilidad civil no cubren esas posibles incidencias, por ello es cada vez más necesario disponer de estas pólizas de ciberriesgos. Por este motivo, Caja Rural de Teruel ha ampliado las cobertura de este seguro para proteger a clientes autónomos de sufrir un posible ataque informático y proporcionarles el asesoramiento de expertos cuando estos hechos ocurren. Es muy necesario en la práctica totalidad de sectores, pero más en aquellos que manejan datos, procesos informáticos, ficheros o transacciones de información ya que podría suponer un daño y riesgo en el normal funcionamiento de la actividad de los negocios.

Toda persona que diariamente utiliza un ordenador, o cualquier dispositivo conectado a internet, es vulnerable de sufrir un ciberataque por parte de expertos informáticos, denominados hackers. España es el tercer país a nivel mundial con mayor volumen de ciberataques, según datos de Ironhack. Estos ataques pueden afectarnos a través de correos electrónicos, llamadas y mensajes maliciosos, para evitarlos es importante seguir algunas recomendaciones como el cambio periódico de contraseñas y desconfiar de mensajes cuyo remitente desconozcamos. Aún así, todo tipo de empresas son vulnerables de sufrir este tipo de ataques que pueden realizarse desde cualquier parte del mundo.